Dice la letra de una canción, que cuando Dios hizo el Edén, pensó en América. Y si ese es el caso, el huerto del Edén sería el Perú. El Perú, con su rica biodiversidad y condiciones geográficas privilegiadas y únicas, tiene el potencial de convertirse en un importante productor de alimentos orgánicos de alta calidad.
La reciente reglamentación que establece una moratoria de transgénicos hasta 2035 es un paso en la dirección correcta para preservar esta riqueza natural y promover la producción de alimentos más saludables y sostenibles.
El 21 de mayo del 2023, publiqué en esta columna “Con mi agricultura no te metas”, en donde tuve la oportunidad de escribirles una carta abierta a nuestros padres de la patria de LA COMISIÓN DE CIENCIA, INNOVACIÓN Y TECNOLOGÍA DEL CONGRESO DE LA REPÚBLICA.
Si quieres leer la carta abierta haz click aquí:
https://diariosinfronteras.com.pe/2023/05/21/con-mi-agricultura-no-te-metas/
Hay varias razones para oponerse al ingreso de organismos vivos modificados (OVM):
- Preservar la biodiversidad y los ecosistemas frágiles. Los monocultivos de OVM implican deforestación y contaminación genética.
- Mantener la ventaja comparativa en producción orgánica y evitar la contaminación cruzada.
- Satisfacer la creciente demanda mundial de alimentos orgánicos y naturales.
- Generar más empleo y desarrollo rural al requerir la producción orgánica más mano de obra.
- Proteger la salud de agricultores y consumidores ante los posibles riesgos de los OVM.
- Según Amigos de la Tierra, los riesgos potenciales de los transgénicos son muy diversos, incluyendo
la aparición de nuevas alergias, la creación de nuevos tóxicos y problemas de fertilidad.
Los productos orgánicos son fabricados a base de ingredientes saludables y métodos tradicionales, lo que los hace más saludables y beneficiosos para el ser humano. Además, la agricultura orgánica favorece el equilibrio del ecosistema y preserva los recursos naturales.
Aunque los alimentos transgénicos ya se consumen en el país, es importante regular su producción y comercialización para proteger la biodiversidad y la salud de la población.
Además, la agricultura orgánica no solo es beneficiosa para la salud y el medio ambiente, sino que también puede ser un motor de desarrollo económico para el país. El crecimiento de la producción orgánica en el Perú ha beneficiado a pequeños productores, mejorando sus ingresos y representando un importante valor de agroexportación.
Asimismo, la demanda de productos orgánicos a nivel internacional está en aumento, lo que brinda oportunidades para la exportación de productos peruanos de alto valor agregado.
Finalmente, la reglamentación que establece una moratoria de transgénicos hasta 2035 es fundamental para preservar la riqueza natural del Perú y promover la producción de alimentos orgánicos de alta calidad.
La semilla es libertad, gobernanza y seguridad alimentaria, no solo para el Perú sino para América y el mundo. Por ahora los lobbies de los transgénicos, que no son nada santos, han perdido la batalla, no bajemos la guardia. Somos libres, seámoslo siempre.
Como siempre esta columna llega gracias a Sin Fronteras, Cuentic, Nut´s & Co. Café orgánico Mishqui Huayo, Tranzfer.me y Frezkito.
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