Fernando Tejeda Motta, de 27 años, pudo ser identificado gracias a un tatuaje que tenía en el brazo izquierdo. Un miembro de su familia reconoció la figura y de esa manera terminó la incansable búsqueda de 40 días en el río Chili.
Como se recuerda, el estudiante de ingeniería cayó al río Chili el pasado 21 de marzo mientras intentaba grabar videos paranormales en la antigua fábrica de textiles La Unión (Uchumayo). La familia nunca perdió la esperanza de encontrar su cuerpo y, finalmente, la noche del lunes se produjo el hallazgo en el sector de Canaura (La Joya).
Más de treinta minutos de caminata a pie les tomó a los policías de Carreteras y Rescate para llegar hasta al cuerpo de Fernando. El acceso resultó complicado debido al mal estado de la vía y a la falta de señal de telefonía móvil. Tras la recuperación, los familiares se inclinaron ante el cuerpo del joven y agradecieron a la Virgen de Chapi.
“Encontrar el cuerpo de mi sobrino es un milagro de la Virgen de Chapi. Hay personas que desaparecen en el río y nunca más se sabe de ellos”, dijo Danitza Motta, tía del universitario. Asimismo, manifestó que fue un agricultor quien visualizó el cuerpo y de inmediato se puso en contacto con la familia.
Una vez en el lugar, los agentes, provistos de una canastilla y cuerdas, lograron acceder a la zona y recuperar el cadáver de Fernando, quien fue identificado por un tatuaje que tenía en el brazo. “La esperanza de encontrarlo es algo que nunca perdimos”, acotó.
El cadáver del universitario fue trasladado a la morgue Central para la necropsia de ley, donde los forenses se encargarán del proceso de identificación legal del joven tiktoker.
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