Cercado. La demanda de viajes interprovinciales en el terminal terrestre de Arequipa aún continúa a la baja. Pese a que han pasado más de 30 días desde la reapertura de sus puertas, la reactivación de su sector solo se ha dado en un 9% debido a que la gente solo se moviliza por motivos estrictos de trabajo o necesidad.
Pero la caída de afluencia también se debe al transporte informal, que si bien cuesta más, es la mejor opción para evitarse protocolos engorrosos. Sin embargo, con esta decisión no solo los usuarios corren el riesgo de contraer la COVID-19, sino también se pone en evidencia la ausencia de las autoridades para su control.
Antes de la pandemia, el establecimiento transportaba en promedio a 7 mil pasajeros diarios en las 60 empresas que operaban. En cambio, ahora, con las 15 empresas que brindan el servicio, la asistencia máxima desde que volvieron a atender es de 721 usuarios al día, cifra que revela una mejora en comparación a las primeras semanas, donde solo se transportaban a 250 viajeros.
Este incremento se habría dado por la reapertura de las demás rutas alimentadoras en la región. Sin embargo, esta cifra sigue siendo insuficiente para mantener los costos de operación del terminal terrestre.
Marco Chauca, gerente de la Corporación Administradora de Terminales Terrestres de Arequipa (Corattsa), explicó que al igual que la crisis que vienen sufriendo las empresas de transporte que no han podido reactivarse, están los puestos comerciales del interior del establecimiento, puesto que solo el 1%, es decir, 5 de 60 locales, ha empezado a operar.
La posibilidad de que reabran otros negocios es menor debido a los protocolos de bioseguridad que exige el Ministerio de Salud, que son bastante estrictos, y a la competencia informal. Estos últimos operan en las afueras del terminal, sin ser intervenidos, pese a que expenden sus productos sin los cuidados mínimos.
Al respecto, Chauca señaló que el alcalde provincial Omar Candia se comprometió a realizar operativos, pero esto solo quedó en palabras, ya que hasta la fecha no hubo acciones, y por ello el gerente solicitó a las demás autoridades, tanto al Gobierno Regional de Arequipa cuanto al nuevo jefe del Comando COVID-19, Percy Miranda, que inicien con los operativos, y no solo para los ambulantes, sino también para el transporte informal, puesto que las exigencias deben ser las mismas para todos los que brindan un servicio público.
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