Una autolesión, un falso traslado médico y un comando armado reclutado en Lima formaban parte del operativo que buscaba liberar a Erick Moreno Hernández
Erick Luis Moreno Hernández, alias El Monstruo, tenía listo un plan de escape tan audaz como violento desde el penal de Paraguay donde permanece recluido desde septiembre. Investigaciones policiales y testimonios de su nueva operadora financiera, Josselyn Balarezo Moreno alias Bala, revelaron que el cabecilla pretendía fingir una emergencia médica para salir del penal y ser rescatado por un comando armado reclutado desde Lima.
Según Bala, el plan se activaría cuando Moreno se autolesionara para forzar un traslado externo. En plena calle, un grupo de sicarios interceptaría a las autoridades para liberar al líder criminal. La joven, detenida en Lima, explicó que varios integrantes “ya tendrían que haberse ido”, en referencia a los viajes hacia Paraguay para posicionar al comando.
El operativo había comenzado a estructurarse desde los primeros días de detención del cabecilla. Balarezo coordinaba con él mediante videollamadas, ocultaba armas, alquilaba inmuebles y movía dinero para financiar el rescate. Su rol se volvió central tras la captura de la anterior cajera del grupo, Grace Bados Neyra. Incluso viajó a Brasil y Paraguay para entregarle fondos directamente a Moreno.
La Policía confirmó su importancia dentro de la organización. En un audio revelador, alias Chiki armero del grupo le advierte: “Tú eres la que va a cargar con todo”. Y así fue: Balarezo recibía dinero, realizaba más de 600 envíos y más de 300 transferencias que sumaban más de medio millón de soles, recaudados por extorsiones en Comas, Puente Piedra e Independencia. Parte de esos recursos se destinaba a financiar el rescate armado.
Los agentes también hallaron armas, dinamita y municiones en viviendas alquiladas por ella para los armeros Chiki y Paolo, todas vinculadas al operativo de fuga.
Tras su captura, la División de Secuestros activó coordinaciones internacionales. El coronel PNP José Cruz Chamba informó que Paraguay reforzó la seguridad del penal y que se enviaron reportes y evidencias para evitar cualquier intento de escape. La reconstrucción del plan incluyó rutas hacia el hospital, puntos de asalto y el movimiento de mensajeros entre Perú, Brasil y Paraguay.
La caída de alias Bala y la intervención de las autoridades desarticularon, por ahora, la fuga que El Monstruo había diseñado a detalle. Mientras tanto, continúa el proceso para su extradición al Perú, donde enfrenta cargos por secuestro, extorsión y crimen organizado.
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