La Policía detuvo a Jack Jeison Díaz Díaz (28), acusado de integrar una banda que presuntamente dopaba a sus víctimas para luego desvalijar sus viviendas. El hombre fue capturado cuando intentaba escapar por los techos de una casa intervenida en la avenida Tarapacá (Miraflores), donde se hallaron decenas de artefactos tecnológicos robados horas antes.
La intervención policial ocurrió luego de la denuncia de Nashira Q. Y. (24), quien alertó que computadoras, televisores, celulares y otros objetos fueron sustraídos de la vivienda de su padre, ubicada en Villa Ecológica (Alto Selva Alegre). La joven indicó que su abuela vio a los presuntos delincuentes huir en un auto blanco de placa D1S-306, lo que permitió a los agentes rastrear el vehículo hasta un predio que funcionaba como lavandería y restaurante.
La madrugada de ayer, al llegar al inmueble, los policías escucharon ruidos y movimientos sospechosos, por lo que ingresaron. Dentro del lugar encontraron varios ambientes donde se hallaban los televisores, los PC y diversos equipos, los cuales fueron reconocidos de inmediato por la denunciante como parte de lo robado. En el interior también estaban varias mujeres en aparente estado de ebriedad que intentaron impedir el paso a los agentes.
Durante el registro inicial, fueron detenidas las hermanas Carla Barrionuevo M., Daniela Vilca M., Soledad Rivera, Katherine Reyner M. y Fiorela Vilca M., a quienes se les acusa de ocultar los bienes robados. Los agraviados Miguel Q. (39) y Liseth A. (30) declararon que estuvieron bebiendo con Jack Díaz y una mujer, tras lo cual perdieron el conocimiento y despertaron sin sus pertenencias.
Cuando las diligencias continuaban, la fiscal adjunta Indira Llacho notó que un hombre caminaba sobre el techo del tercer nivel del inmueble. Los agentes lo atraparon de inmediato y confirmaron que se trataba de Jack Díaz, señalado por las víctimas como el sujeto que los habría dopado para luego robar sus bienes y cargarlos en el vehículo blanco intervenido.
Los familiares de las mujeres detenidas negaron que estas formen parte de la banda y aseguraron que una de ellas es expareja del sujeto capturado. Según contaron, la noche del domingo, el hombre la habría llamado para pedirle que guardara algunas cosas en su vivienda, pues supuestamente se había peleado con su pareja. La Policía investiga la participación de las mujeres, ya que, en un inicio, se negaron a colaborar con las diligencias.
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