Una nueva tragedia enluta a la ciudad de Puno en pleno aniversario. En horas de la mañana, vecinos hallaron a dos jóvenes tendidos en la vereda, en la intersección de los pasajes Choquehuanca y Wendorff, cerca a las discotecas del jirón Melgar.
PENSARON QUE DORMÍA
Al intentar despertarlos, solo uno reaccionó. Minutos después, personal de bomberos confirmó que el otro joven había fallecido.
El sobreviviente relató a la Policía que ambos habían estado horas antes en la discoteca Ruskaya. Fue intervenido para las investigaciones. Agentes especializados, junto a Medicina Legal y el Ministerio Público realizaron las diligencias correspondientes.
Al fallecido no se le hallaron documentos ni pertenencias, por lo que inicialmente fue registrado como NN. Luego se conoció que sería Junior Leonel Cáceres Quispe (20), aunque su identidad debía confirmarse mediante prueba biométrica.
INSEGURIDAD
Vecinos denunciaron negligencia en la atención de las autoridades. Indicaron que llamaron primero al Serenazgo, pero no acudieron y, en cambio, les pidieron enviar fotografías de los jóvenes. Luego alertaron a la Policía, cuyo patrullero pasó por la zona y se retiró. Solo tras la llegada de los bomberos se confirmó el deceso. Recién después aparecieron efectivos policiales y Serenazgo, cuando ya era demasiado tarde.“El municipio no hace nada para prevenir estos hechos; vivimos entre escándalos y peligro constante”, lamentó el médico Luis Enríquez Lencinas, vecino del sector. Hasta el momento del traslado del cuerpo a la morgue de Juliaca, ningún familiar del fallecido se había presentado.
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