El gerente general del Gobierno Regional de Arequipa (GRA), Johan Cano Pinto, presentó este jueves su renuncia al cargo, luego de que se filtraran conversaciones de WhatsApp que lo vinculan con una presunta red de corrupción para direccionar obras y contratos de infraestructura en la región.
En los chats, que circulan desde inicios de semana, Cano aparece coordinando la salida de funcionarios incómodos, celebrando la destitución del exgerente de Infraestructura, Fabián Enríquez Mamani, y diseñando la colocación de nuevos cuadros bajo su confianza. Además, se hace referencia a supuestos acuerdos con empresarios para manipular procesos de contratación, así como a contactos judiciales para frenar oposiciones.
Uno de los pasajes más polémicos de las conversaciones incluso sugiere la utilización de «detenciones preliminares» contra críticos de la gestión, lo que ha generado fuerte indignación entre consejeros regionales y organizaciones civiles. En otro tramo, Cano ordena que en reuniones con contratistas no se mencione su nombre, lo que alimenta las sospechas sobre negociaciones paralelas.
Frente a la presión política y mediática, Cano optó por apartarse del cargo. El gobernador regional Rohel Sánchez, habría designado a Berly Gonzáles Arias como nuevo gerente general.
La renuncia se produce en un contexto de crecientes cuestionamientos al GRA, donde se han producido cambios recientes en el área de Supervisión de Obras y en la Asesoría Jurídica, esta última dirigida por la abogada Valeria Chipana, también mencionada en los chats.
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