Último adiós a Jeyco Ángel. Entre gritos de dolor y pedidos de perdón, Julia Torres Guizado (45), despidió a su pequeño hijo, Jeyco Ángel, de solo 3 años, quien murió calcinado la mañana del domingo tras un incendio en su habitación alquilada, ubicada en el jirón Obelisco.
La tragedia ocurrió cuando Julia salió un momento a sacar su carreta de empuje para iniciar su jornada, dejando a su hijito sobre la cama viendo el celular.
La humilde madre de familia, había dejado agua hirviendo en la cocina y, según se supo, el gas se filtró por una manguera en mal estado, generando una explosión que acabó con la vida del niño.
“PERDONAME, HIJO”
«Mi hijito iba a cumplir 4 años el 6 de septiembre… ya no podía hacer nada», dijo entre lágrimas la madre, quien no deja de culparse por el terrible descuido.
DOLOROSO ADIÓS
El último adiós se realizó ayer en el cementerio La Capilla, donde familiares, amigos y vecinos dieron el último adiós al pequeño Jeyco. La escena fue desgarradora, y más cuando doña Julia recordaba que, un día antes, el pequeño bailaba con alegría solo para verla reír. Fue su última imagen viva.
“Perdóname, hijo”, gritaba la madre abrazando el cajón blando de su criatura. “Déjenme a su lado”, imploraba mientras abrazaba el pequeño ataúd.
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