En una polémica decisión, el obispo Ciro Quispe López destituyó al padre Baltazar como párroco de Santiago Apóstol de Kelluyo después de que este solicitara mayores recursos para mejorar la atención pastoral en las comunidades aymaras de la zona.
Según fuentes eclesiásticas, el sacerdote pedía especialmente apoyo en movilidad para atender adecuadamente a los feligreses de las zonas más alejadas del distrito.
CUESTIONABLE DECISIÓN
El Obispado dispuso que las atenciones parroquiales de Kelluyo serán asumidas desde ahora por la parroquia San Andrés de Desaguadero, a cargo del padre Aurelio Cjuro, lo que ha generado preocupación entre los fieles por la posible dificultad en el acceso a los servicios religiosos.
PADRE SE DEFIENDE
El padre Baltazar, en comunicado por las redes sociales, aclaró que su salida no obedece a falta de compromiso: «He servido con dedicación a esta comunidad, pero necesitábamos mejores condiciones, especialmente movilidad, para atender debidamente a nuestros hermanos de las comunidades más alejadas. Agradezco profundamente el cariño recibido durante mi servicio en Kelluyo», expresó el sacerdote.
La medida ha causado malestar entre los feligreses y algunos sectores de la iglesia local, quienes cuestionan la decisión del obispo Quispe López de remover a un sacerdote por buscar mejorar el servicio pastoral.
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