El obispo de Juli, Ciro Quispe López, implicados en escándalos en su jurisdicción, insiste en actuar al margen de la ley. Esta vez pretende desalojar los ambientes donde funciona el Colegio de Alto Rendimiento (COAR) de Puno en Chuchito, actuando con un poder revocado.
Ese inmueble en cuestión es de propiedad de la Iglesia Católica, pero de tres obispados: las prelaturas de Sicuani, Ayaviri y Juli. Son embargo, esta última pretende alquilar unilateralmente.
El gerente general del GRP, Óscar Macedo Cárdenas, indicó que la prelatura de Juli no posee actualmente un poder vigente para realizar este tipo de requerimientos, ya que el poder otorgado solo por la Prelatura de Sicuani (no de Ayaviri) expiró en setiembre de 2024. Macedo explicó que, debido al vencimiento del poder especial, no es posible renovar el convenio de alquiler hasta que se actualice su vigencia.
RECHAZA EL DIÁLOGO
Para hoy a las 3 de la tarde, el GRP ha convocado a los tres prelados a fin de solucionar el impase y actuar de acuerdo a la ley. Los religiosos de Sicuani y Ayaviri ya están presentes, pero nos indican que el clérigo de Juli habría enviado una carta notarial, anunciando que no asistiría.
En una emisora local, Ciro Quispe ayer dejó entrever que si el GRP suscribió el alquiler con la prelatura de Juli, solo con ella debe continuar. Es decir, Sicuani y Ayaviri, sobrarían en este conflicto
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