Una fuerte explosión ocurrida en un taller ubicado en la Asociación Pirotécnicos de Villa Fontana, en el distrito de Cerro Colorado, dejó tres personas muertas y una herida de gravedad. La magnitud del estallido fue tal, que los restos de las víctimas quedaron esparcidos en un radio de 200 metros.
El incidente se registró en el taller «Tehuan», formalmente autorizado para la elaboración de pirotecnia, pero que habría cambiado de giro y estaba operando irregularmente como una fábrica clandestina de explosivos de fragmentación, usados en actividades como voladuras mineras.
Según las primeras investigaciones, en el momento del accidente, cuatro personas habrían estado llenando cápsulas con pólvora a presión en el interior del predio. Se presume que el calor o una mala manipulación habría provocado la detonación. La estructura del inmueble de sillar y calaminas, por la detonación, se derrumbó.
Vecinos relataron haber escuchado dos fuertes estruendos que estremecieron toda la zona. Al salir, encontraron una escena desoladora, restos humanos en lotes aledaños y escombros por doquier. Incluso uno de los cuerpos quedó irreconocible ya que solo se logró hallar algunas partes. La única persona que sobrevivió fue Saúl Challco Huanca, quien fue trasladado al hospital Honorio Delgado Espinoza con quemaduras de primer y segundo grado, además de una presunta fractura en la cadera y pierna.
Hasta el lugar llegaron agentes de la comisaría de Zamácola, personal especializado de la Unidad de Desactivación de Explosivos (UDEX), bomberos, peritos de Criminalística y el fiscal de turno para realizar el levantamiento de los cuerpos e iniciar las investigaciones.
Marco Antonio Zanabria, subgerente de Licencias y Seguridad en Edificaciones del municipio distrital, informó que el taller contaba con una licencia vigente desde 2010 para producir pirotecnia. Sin embargo, se descubrió que el local había sido subarrendado a la empresa brasileña IPP, la cual se dedicaba a la elaboración de explosivos industriales, sin autorización para dicho giro comercial. “Esto no fue notificado. El cambio de actividad no autorizada constituye una falta grave”, declaró el funcionario, quien adelantó que ya se inició un proceso administrativo que podría culminar con la revocación de la licencia de funcionamiento y sanciones al propietario del predio.
Comentarios de Facebook