Uno de los efectivos no permitió que se les tomara imágenes lo que ha sido catalogado como un insultante ‘espíritu de cuerpo».
Ayer cuando los siete policías que perpetraron un asalto a una vivienda en Juliaca, eran trasladados a la Divincri para efectuar las diligencias, los periodistas que cubrían el hecho advirtieron el abuso de algunos uniformados, en especial de uno de apellido Romero, quien impedía que captaran imágenes a sus colegas intervenidos. Otros lo secundaban con menos agresividad.
Esta situación mortificó a los hombres de prensa porque vulneró derechos constitucionales al coactar la labor informativa.
Al respecto, la Red de Periodistas de Juliaca, que agrupa a casi todos los que ejercen el periodismo en la Ciudad de los Vientos, emitió un enérgico pronunciamiento.
Tras expresar su repudio por esa actitud, exigieron al general PNP, Francisco Ninalaya Martínez, que se pronuncie porque el gremio periodístico no permitirá que se restrinja la libertad de información.
Desde Sin Fronteras, nos solidarizamos con los colegas que sufrieron la absurda represión y demandaron que el alto mando disponga a sus efectivos el respeto irrestricto a toda la ciudadanía incluida la prensa. Sabemos que la PNP tiene buenos elementos y que solamente unos cuantos son los que opacan su integridad, y a ellos se les tiene que conocer tan igual que otros que pisotean la ley. Salvo que hayan órdenes de imponer un despreciable «espíritu de cuerpo».
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