En Tumbes, vecinos y padres de familia de la institución educativa Miguel Grau, en Puerto Pizarro, retuvieron durante casi cuatro horas al gobernador regional Segismundo Cruces Ordinola, luego de que este no asistiera a una reunión pactada para tratar la crisis de infraestructura del colegio.
La tensión aumentó cuando la autoridad regional fue encontrada en un restaurante junto a funcionarios, en aparente estado de ebriedad.
Entre gritos y reclamos, el gobernador se refugió en su vehículo y evitó dar declaraciones. Fue necesaria la intervención policial para resguardar la zona. Por su parte, Cruces Ordinola negó haber estado ebrio y justificó su ausencia señalando que había fallecido un amigo suyo y que se había sentido mal.
A la reunión asistieron representantes de Defensa Civil, la Defensoría del Pueblo y el Programa Nacional de Infraestructura Educativa (Pronied).
GORE TUMBES SE COMPROMETE A EJECUTAR OBRAS
En la institución educativa Miguel Grau estudian 1500 alumnos. El año pasado, dos pabellones fueron declarados de alto riesgo por Defensa Civil y se recomendó su demolición. No obstante, la obra no se concretó durante los meses de verano.
Actualmente, parte del alumnado recibe clases virtuales, mientras que los padres de familia de otro grupo se ven obligados a pagar un sol diario para alquilar espacios vacíos, como casas y restaurantes, donde sus hijos puedan estudiar.
En declaraciones a TVPerú Noticias, el gobernador regional Segismundo Cruces Ordinola se comprometió, la mañana de este jueves, a demoler los pabellones en mal estado y habilitar aulas temporales en un plazo de 16 días para que los niños puedan asistir a clases y no vean peligrar el año escolar.
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