El caso del adolescente Alexis N.Q.L. (17), que fue brutalmente agredido en la cabeza el pasado 31 de diciembre en la avenida Costanera tras haber asistido junto a un amigo a una discoteca ilegal de la zona, sigue sin tener pistas de quienes le causaron graves daños.
BRUTAL AGRESIÓN
Como se recuerda Alexis, que había acabado sus estudios secundarios en el colegio Glorioso San Carlos, se preparaba para postular a la universidad, el pasado 31 de diciembre en un confuso incidente fue sacado de una discoteca donde estaba con un amigo y luego fue brutalmente golpeado en la cabeza, sus agresores lo dejaron tendido inconsciente en la avenida cerca al cruce con el jirón Lampa, luego fue llevado por la Policía al servicio de emergencia del Hospital Regional de Puno, estaba como NN hasta que al día siguiente, 1 de enero, en horas de la tarde sus familiares recién lo ubicaron en el nosocomio.
Desde esa fecha los resultados de las investigaciones policiales no han progresado y hasta el momento no hay indicios de los que lo agredieron hasta casi matarlo.
SALIÓ DE UCI
Alexis el pasado 29 de enero salió de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), del hospital regional, fue derivado a la cama 33 del servicio de Cirugía de especialidades. Su estado no ha mejorado.
«No habla, no tiene movimiento en el cuerpo, su ojito no más se mueve, a veces pareciera que nos reconoce, tienen que alimentarlo con una sonda», narró entre lágrimas su madre, Trinidad López. Ella indica que su hijo requiere de cuidado especial y tiene que sacrificarse a diario para poder viajar desde Pomata y verlo.
SIN RESPONSABLES
Ella señaló que hasta el momento las investigaciones para identificar a sus agresores no han progresado.
«La cámara de seguridad del municipio no funcionaba ese día, justo la que está cerca donde lo agredieron, eso nos dijeron.
Luego de un local privado nos dijeron que sí, pero luego cuando solicitamos con la Policía se negaron», señaló. Ella pidió a las autoridades que no dejen de lado el caso de su hijo y puedan lograr identificar a los agresores.
«Él iba a ingresar a la academia para postular a la UNA, ese 31 (de diciembre) estaba en Puno para eso, su amigo estaba con él en esa discoteca, él sabe qué pasó pero ya no quiere hablar», indicó.
La madre de Alexis pidió a la Policía que no cese en las investigaciones, mientras llora por su hijo que no volverá a recuperarse como antes de ese lamentable día.
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