Alejandra Aramayo, jefa de la Oficina de Comunicaciones e Imagen Institucional del Congreso de la República, presentó su renuncia al cargo mediante un oficio dirigido al presidente del Parlamento, Eduardo Salhuana.
En su carta, Aramayo expresó su malestar por la reciente exposición mediática de asuntos personales y familiares, mencionando que ciertos medios han distorsionado los hechos.
Su decisión de renunciar se dio poco después de la emisión de un reportaje de Cuarto Poder, donde se reveló que demandó a su madre y a parte de su familia por un tema de anticipo de herencia.
A pesar de agradecer la confianza depositada en ella y destacar los avances en la imagen del Congreso, Aramayo afirmó que su renuncia es un acto de desprendimiento, enfatizando que las instituciones deben estar por encima de las personas.
El documento fue remitido el 4 de marzo y su dimisión ocurre en un contexto en el que integrantes de la Mesa Directiva, como el congresista Alejandro Cavero, ya habían manifestado opiniones que sugerían su salida. Ahora, el presidente del Congreso deberá designar a su reemplazo en las próximas horas.
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