En el distrito de Motupe, Lambayeque, más de 5,000 agricultores están enfrentando una crisis sin precedentes, obligados a enterrar sus mangos debido a la sobreproducción y a la drástica caída de precios, que llegan a tan solo S/0.10 por kilo.
Este precio no cubre ni la mitad de los costos de producción, dejando a las familias productoras al borde de la quiebra. Según Daniel Enríquez, representante de los productores locales, algunas empresas han ofrecido comprar la fruta a precios irrisorios, como S/6 por una caja de 20 kilos, pero los agricultores rechazan la oferta ante la baja compensación.
Normativas sanitarias obligan el entierro de la fruta
“Nos están ofreciendo precios abusivos, S/6 por 20 kilos para el mercado extranjero. Es una cantidad ridícula, y si no aceptamos, nos dicen que perderemos la cosecha. Esta es la dura realidad que estamos viviendo”, declaró Enríquez en una entrevista para un medio local. La falta de compradores ha causado la pérdida de más de 500 toneladas de mango, que debido a la normativa del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), deben ser enterradas para evitar plagas como la mosca de la fruta.
“Enterramos los mangos para cumplir con las normativas sanitarias y evitar que nos prohíban la exportación. Si la mosca de la fruta se propaga, no podremos vender en mercados internacionales», explicó Enríquez.
Protesta en la Panamericana Norte si no hay respuesta del Gobierno
Como medida de protesta, los productores planean lanzar 100 toneladas de mango en la Panamericana Norte si el gobierno no da respuesta a sus demandas. Aunque preferirían hacerlo en Chiclayo, cerca del gobierno regional, la falta de recursos para trasladar la fruta los ha llevado a elegir este simbólico acto de denuncia.
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