El pueblo de Ilave dio una tregua al obispo, Ciro Quispe López, a quien le dieron como plazo hasta el sábado para que atienda y resuelva sus demandas, caso contrario la feligresía aymara entrará en un paro indefinido.
Cabe recordar que en la víspera, un gran número de devotos, sitiaron el frontis del templo San Miguel Arcángel, lanzando graves imputaciones del pasado -que no se aclararon-, y otras acciones recientes que han colmado a la feligresía.
Esta vez, la población aymara reclama la disposición de cambiar a tres sacerdotes que sirven en Ilave, los que han logrado cambiar la imagen de la Iglesia en esa provincia tras el desprestigio que habría provocado un padre por abusivas y pérfidas actitudes.
Le exigen que deje sin efecto los cambios de tres párrocos que habría dispuesto en Ilave.
A monseñor Quispe López también se le exige que rinda cuentas sobre la colecta «Respira Collao» realizada a mediados del 2021 en plena pandemia. Tras la cruzada solidaria la Iglesia recaudó dinero del pueblo para comprar balones de oxígeno, camas hospitalarias, respiradores individuales, entre otros. No se sabe dónde están los bienes, a pesar de que esto fue exhibido en la Plaza de Armas de Ilave.
También le exigen al prelado que devuelva a Ilave los libros de bautizos y matrimonios, ya que estos se los llevaron a Juli, «para lucrar», entre otras demandas.
SE ENCADENARON
Tal como lo transmitimos en vivo, el frontis del templo ilaveño fue tomado por furiosos pobladores que no dudaron en escribir sus quejas y pedidos en elocuentes cartulinas que las pegaron en las rejas y puertas de la iglesia.
Augusto Zúñiga, presidente de la Hermandad del Santo Sepulcro, recordó que el expárroco solía cobrar de manera abusiva grandes sumas de dinero y no daba comprobante. Esto lo contó para dejar en claro que los aymaras acordaron que no permitirían que llegue a Ilave un párroco cuya labor es desconocida. «Ahora que eso ha cambiado, que la gente acude masivamente al templo, el obispo quiere cambiar al padre Pedro Sihuayro, que apenas tiene un año y en este tiempo hizo una buena gestión, se ha hecho querer», narró y detalló que además se ordenó que también se cambie al vicario Gilber Mamani y al padre Baltazar Parillo, quien provino de la parroquia de Acora.
ULTIMÁTUM
En ese sentido, señaló que el mismo domingo en la noche se reunieron con los miembros de la Hermandad del Santo Sepulcro y la Congregación del Sagrado Corazón de Jesús y María, acordando que aguardarán hasta el próximo sábado 3 de enero, para que resuelvan sus reclamos. «Y sino el domingo empezamos la huelga indefinida. El obispo no va a bapulear al pueblo de Ilave. Ahora se está coordinando con las fuerzas sociales, esto no se va a quedar así», aseguró.
Del mismo modo, contó que el domingo se recolectaron cientos de firmas para acompañarlas a memoriales dirigidos al arzobispo de Arequipa, Javier Augusto del Río Alba y al nuncio apostólico en el Perú, Paolo Roco Gualtieri. «Se ha enviado dos memoriales a los correos de estas autoridades, ahora las enviaremos en físico», añadió.
Con animo tolerante, hizo un llamado al obispo de Juli, para que «recapacite y enmiende sus errores o se someta a la protesta del pueblo, de todas las bases. No se equivoque señor obispo, no se equivoque», emplazó.
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