El 2025 se acerca con muchas sorpresas, y una de las más interesantes es la nueva Cuenta DNI. Pero, ¿te has preguntado qué implicancias tiene esto para ti?
La reciente modificación del Reglamento de la Ley Nº 31120, a través del Decreto Supremo Nº 283-2024-EF, redefine la Cuenta Documento Nacional de Identidad (Cuenta DNI). Ahora, esta cuenta se considera una cuenta de ahorros en moneda nacional que opera en un entorno digital. Está vinculada directamente al número de DNI del titular y su funcionamiento será regulado por el Banco de la Nación. Esta iniciativa busca promover la inclusión financiera y facilitar el acceso a servicios bancarios para una mayor parte de la población peruana.
¿Para qué nos estamos preparando?
Ahora bien, ¿cuál es la transición que se avecina? Por un lado, hay quienes prefieren no dejar el dinero en efectivo, argumentando que este les ofrece más libertad. Sin embargo, los gobiernos están preparando una transición masiva hacia las CBDC (Central Bank Digital Currency), o monedas digitales de bancos centrales. Estas son una forma de dinero fiduciario digital emitido por un banco central.
La opción DeFi
Aunque muchos aún no lo saben, la población tiene la opción de incursionar en las finanzas descentralizadas o DeFi.
¿Qué es DeFi?
Las finanzas descentralizadas (DeFi) son un conjunto de servicios financieros que operan sobre redes de blockchain, permitiendo a los usuarios realizar transacciones sin necesidad de intermediarios tradicionales como bancos o instituciones financieras. Este sistema busca democratizar el acceso a servicios financieros, ofreciendo mayor privacidad, seguridad y transparencia.
Activos que se comercializan en DeFi
Criptomonedas: Son el activo más común en DeFi. Los usuarios pueden intercambiar, prestar o tomar prestadas diversas criptomonedas, como Bitcoin (BTC), Ethereum (ETH) y muchas altcoins.
Stablecoins: Estas criptomonedas están diseñadas para mantener un valor estable en relación con activos subyacentes, como el dólar estadounidense. Ejemplos incluyen USDC y DAI. Las stablecoins son ampliamente utilizadas en DeFi para facilitar transacciones y préstamos debido a su menor volatilidad.
Tokens de gobernanza: Permiten a los poseedores participar en la toma de decisiones dentro de un protocolo DeFi. Los usuarios pueden votar sobre cambios en el protocolo, como ajustes en las tasas de interés o la dirección del desarrollo del proyecto. Ejemplos incluyen COMP (de Compound) y MKR (de MakerDAO).
Tokens de liquidez: Al proporcionar liquidez a un intercambio descentralizado (DEX), los usuarios reciben tokens que representan su participación en un pool de liquidez.
Derivados: Algunos protocolos DeFi permiten a los usuarios especular sobre el precio futuro de activos mediante contratos derivados, que incluyen opciones y futuros basados en criptomonedas.
NFTs (Tokens No Fungibles): Aunque no son exclusivamente financieros, algunos proyectos DeFi han comenzado a integrar NFTs como colateral o para representar activos únicos dentro de sus plataformas.
Si quieres saber más no dudes en escribir a “La Academia de la Singularidad”, academiasingularidad@gmail.com con el asunto DEFI.
¡Feliz año!
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