Debido al descenso del nivel del lago Titicaca, las zonas de desove del carachi se vienen secando, y los peces nativos no desarrollan su ciclo de reproducción, causando una alarmante disminución de la biomasa, hasta un 90%.
Esta situación la descubrió el proyecto “Recuperación de la biomasa de carachi gris y amarillo”, cuando recolectaban ovas y su incubación en laboratorios de la Dirección Regional de la Produccción (Direpro).
El gobernador regional Richard Hancco Soncco, recomendó a ese sector que se prosiga con el repoblamiento de las especies nativas a tres millones 200 mil alevinos de carachis amarillos y gris, en este primer año de intervención.
José Antonio Huayta Calisaya, titular de la Direpro, en coordinación con el responsable del proyecto, Giomar Condori Ticona, redoblaron esfuerzos porque además de que el lago se seca, el impacto ambiental es también amenazante.
En la recolección de ovas en plena sequía, se constató que las zonas de reproducción natural de las orestias están en peligro.
“El ciclo de maduración gonadal de los carachis está culminando e imposibilita una adecuada recolección de ovas que solo se puede ejecutar en las lagunas de Santa Lucía y Saracocha (Lampa).
Se trabaja con 14 organizaciones que entregan gónadas u ovas para garantizar su incubación en la sede de Barco (Chucuito) para obtener alevinos a los 21 días y sembrar las especies en extinción por el cambio climático y depredación», dijo Condori Ticona.
Dicho proyecto es netamente ambiental y no productivo, por esa razón se ejecuta la recuperación del carachi en las 9 provincias y 22 distritos de la región.
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