Nuevas obras en la universidad han generado preocupación entre docentes y estudiantes debido a su impacto en los pabellones antiguos, que han sido declarados patrimonio cultural.
Según el arquitecto José Llanos, de la Escuela Profesional de Arquitectura, el Ministerio de Cultura ha emitido una resolución que prohíbe la intervención en estas estructuras, sin embargo, las obras continúan. Llanos destacó que en el pasado se intentó demoler el Auditorio Magno de la ciudad universitaria, y al no lograrlo, ahora buscan demoler el pabellón administrativo, el cual alberga murales importantes de un concurso nacional de arte.
El proyecto no solo pone en riesgo los bienes patrimoniales, sino que también invade parte de las vías, reduce áreas verdes y presenta varias incongruencias.
«Estamos defendiendo que lo hagan en otro terreno, pero que no se toque el patrimonio de la universidad», señaló Llanos.
Asimismo, recordó que anteriormente se enviaron documentos en defensa del Auditorio Magno, y que el Ministerio de Cultura reafirmó que toda la parte antigua de la universidad es patrimonio y no debe ser intervenida.
Un docente de la Escuela Profesional de Arquitectura, expresó su rechazo a la destrucción de áreas verdes y bienes patrimoniales.
«No permitiremos que se destruyan los pulmones de la universidad, necesitamos más áreas verdes rodeadas de árboles y flores para un entorno académico armonioso», afirmó.
También hizo un llamado a la comunidad universitaria para solidarizarse con la protesta, enfatizando que se busca el desarrollo de la universidad sin comprometer bienes patrimoniales ni las áreas verdes.
Comentarios de Facebook