El decano del Colegio de Ingenieros de Puno (CIP), Jhomar Marcelino Tonconi Quispe, hoy debió sentarse en el banquillo de los acusados, junto a otros procesados, donde se iba a deliberar una apelación a la sentencia que el año pasado, lo absolvió de delitos de corrupción cuando debió ser condenado igual que sus coimputados.
La diligencia estuvo programada por la Sala Penal de Apelaciones para las 10:00 horas, pero llegado el momento no se instaló debido a que el juez superior Reynaldo Luque, uno de sus miembros colegiados, se encontraba con licencia.
A los minutos, se conoció la Resolución 57, en el expediente 01323-218 por el delito de colusión agravada, reprogramándose “la audiencia de apelación de sentencia para el día tres de diciembre de 2024 a las 10:00 horas”, diligencia que se realizará de manera virtual.
Como se sabe, el alcalde del municipio de San Antón, Moisés Yorocco pactó en el año 2015 con los empresarios del Consorcio Innova para que ejecuten la obra de pistas y veredas por un valor de S/ 3 millones 258mil 459.80 soles.
De acuerdo a la Fiscalía Anticorrupción que apeló la sentencia absolutoria, Tonconi Quispe, materializó ese negociado porque entonces era gerente de Infraestructura y además presidente del comité de selección. Se descubrió que él no solo entregó la buena pro de manera irregular, sino que además dio visto bueno para que le paguen valorizaciones sobrevaloradas.
De acuerdo a audios que se difundieron, el alcalde pide S/ 270 mil soles para favorecer a la empresa, e incluso se oye que la coima corresponde al 13% de la obra. El alcalde y los empresarios fueron sentenciados a 10 años de prisión y a pagar una reparación civil, pero el juez de primera instancia, sin una debida motivación, absolvió al funcionario que en la práctica consumó el pacto colusorio.
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