Para la ciudadanía, el alcalde provincial de Tacna, Pascual Güisa Bravo, tendrá que ponerse en manos de sus propios electores de aprobarse la solicitud de revocatoria planteada por una ciudadana tacneña, ante la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), por presuntamente incumplir sus promesas de campaña y no ejecutar una buena gestión administrativa de la comuna provincial en beneficio de su población.

Para la ciudadana Elizabeth, el realizar una revocatoria es algo que se puede plantear si las cosas no funcionan como deberían para algún poblador. “La revocatoria es algo que se dispone por la ciudadanía de Tacna, el ciudadano es libre. Si una autoridad está siendo revocada es porque existe el derecho de hacerlo y ya verá la comunidad si es factible o no y si el alcalde ha hecho algo o no”, señaló.

Por su parte, Román señala que entre el carácter poco afable del alcalde provincial y los pocos resultados de sus estrategias, hay cuestiones que aún no se solucionan, como el agua, residuos y seguridad.

“Hay cosas que mejorar, hay avances en obras de alcantarillado, por ejemplo, el tema de los residuos sólidos que también me aquejan porque en la casa donde vivo hay mucho y también el tema de seguridad porque me siento inseguro al ir a mi casa”, expresó.

Finaliza este recordatorio del avance de la gestión, la opinión de Alejandro que expresa que hay disconformidad con las obras que no se dan en la ciudad.

“No veo que se haya hecho mucho, no hay pistas buenas ni plazas ni tampoco seguridad, que es lo que prometen cuando están buscando votos. Creo que por eso lo deben querer sacar y eso no diré que es bueno o malo, pero la verdad es que no está bien”, dijo.

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