Tacna. Una depresión natural ubicada en la cuenca de Sama, en la parte alta de Puquio, a 21 kilómetros de la carretera Panamericana, se convertirá en el terreno del embalse Cardos, proyecto que promete ser el más grande de la región. El Proyecto Especial Tacna (PET) aprobó mediante su consejo directivo la formulación, evaluación y aprobación del perfil de la obra con el objetivo de aprovechar los excedentes hídricos en el periodo de lluvias para abastecer de agua de forma continua a los agricultores de Sama y la ciudad de Tacna.
El estudio, encabezado por el ingeniero Vianney Torres Alférez, busca convertirse en una solución a largo plazo para la región ante el déficit hídrico que atraviesa cada año, lo que afecta a los hogares y el sector agrícola. El embalse, que contará con una capacidad inicial de 20 millones de metros cúbicos (MMC) y aún se encuentra en la etapa de preinversión, ya cuenta con el apoyo del Colegio de Ingenieros, que al conocer de forma más detallada el proyecto no dudó en mostrarse a favor de nuevos retos que mejoren la situación hídrica actual.
La iniciativa ha sido felicitada por las autoridades de la zona, entidades de gestión hídrica y la Universidad Nacional Jorge Basadre Grohmann. En una mesa de trabajo presidida por el gobernador regional Luis Torres Robledo y conformada por los representantes del Consejo de Recursos Hídricos de la Cuenca Caplina-Locumba (CRHCCL), la Autoridad Nacional del Agua (ANA), el Colegio de Ingenieros, la Junta de Usuarios y los gobiernos locales de Sama, Inclán y La Yarada-Los Palos se respaldó la propuesta del gobierno central, que ha recibido el apoyo de la actual gestión del Gobierno Regional de Tacna y demuestra un compromiso con la agricultura. Cabe señalar que actualmente el estudio de preinversión cumple los plazos respectivos para pasar a la siguiente etapa.
SITUACIÓN HÍDRICA
La región Tacna cada año atraviesa una escasez de recursos hídricos que afecta a sus pobladores y la agricultura, y el sector de Sama no cuenta con agua para sus cosechas de forma continua, lo que afecta sus producciones anuales, por lo que este proyecto, esperado desde hace más de 50 años por los agricultores de la zona, se presenta como una alternativa de mejora del abastecimiento de agua para su actividad productiva.
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