El miembro de la Compañía de Bomberos de San Román – Juliaca, identificado como Miguel Antonio Zúñiga Hinojosa (33), falleció al dispararse en la cabeza con su arma de fuego.
El lamentable hecho ocurrió ayer, antes del mediodía, en la vivienda del bombero de grado seccionario, ubicada en la avenida Túpac Amaru, en la urbanización Alto Rinconada, a espaldas de la Piscina Municipal.
LA ESCENA
El triste final del voluntario que dedicó parte de su vida para salvar a otros en incendios, accidentes y emergencias médicas, ocurrió en su habitación del tercer piso que compartía con su esposa.
Al parecer, Zúñiga Hinojosa se encontraba bajo los efectos del alcohol y, por razones aún desconocidas, tomó su arma de fuego y se disparó en la cabeza.
MUERTE
Los compañeros de Zúñiga Hinojosa, alertados por la familia, llegaron al lugar de los hechos para socorrerlo, pero ya era demasiado tarde. Según las primeras diligencias, se presume que el bombero había sostenido una discusión con su pareja antes de tomar la fatal decisión. “El caballero de fuego”, deja a sus dos hijos mellizos pequeños huérfanos de padre.
Durante la inspección de la escena y las diligencias, se comprobó que la pistola utilizada por Zúñiga Hinojosa era de su propiedad y estaba registrada formalmente en la Sucamec, ya que también trabajaba como agente de seguridad en Prosegur.
DUELO INSTITUCIONAL
La Compañía de Bomberos está de luto por la pérdida de uno de sus integrantes, quien murió dos días después de la celebración del 59° aniversario de la compañía
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