Enrique Calmet Choque se valió de artimañas y gestiones infructuosas pretendiendo la propiedad y posesión de 12 mil metros cuadrados dentro del Politécnico Huáscar, ubicado en la salida norte de la ciudad de Puno.
Dicha área es un bien de dominio público, en posesión del Ministerio de Educación y los barrios del Cono Norte, pero luego de años consiguió que en setiembre de 2017 el juez Guido Chevarría Tiznado, falle a su favor en un proceso por delimitación de áreas y linderos.
El entonces gobernador regional, Juan Luque, ordenó a la Procuraduría del Gobierno Regional, que la sentencia no se apele para que quede consentida. Para ello, mediaron en favor de Calmet Choque, el director dicho plantel, Rolando Eduardo Aranda, quien pidió que no se impugne el fallo, y el entonces asesor legal de la UGEL Puno, Flavio Cruz Mamani, hoy congresista de la República, dio su visto bueno.
En febrero de 2021 tomó posesión del predio pero fue desalojado por cientos de pobladores del cono norte. Él ingresó con matones, y la muchedumbre los echó a todos de la misma manera.
Luego, el 26 de noviembre de 2021, allanó los 12 mil metros y cuando este era cercado, volvió a ser desalojado, a pesar que aquella vez contrató a venezolanos armados con pistolas “Paintball”, huaracas, ácidos y otros objetos dañinos. Y, el 4 de febrero de 2022, nuevamente tomó posesión, esta vez colocó cerco eléctrico y se atrincheró con decenas de matones, entre ellos extranjeros.
Para estas intentonas, el personaje invirtió ingentes cantidades de dinero, dado que además de las turbas que lo avalaban, se advirtió que la Policía lo resguardaba de manera solícita, pues en 2021, en plena pandemia cuando las reuniones estaban prohibidas se las ingenió para que un fuerte contingente le brinde seguridad.
¿CÓMO LO HIZO?
Se desconoce la friolera suma de dinero que gastó, pero este medio accedió a información que revela quién sería una de sus financistas en las recurrentes tomas del Politécnico Huáscar.
En el expediente 342-2022, del Primer Juzgado Civil de Puno, que despacha el juez José Manuel Huanca Yampara, el aludido Calmet Choque solicita que se anule una conciliación en la que reconoce 180 mil dólares de deuda que le tenía a su prestamista Juana Rina Salas, viuda de Zúñiga.
DESCONOCE DEUDA
En la demanda, Calmet Choque desconoce ese monto por lo que planteó una nulidad de acto jurídico. En sus alegatos, dice “haber recibido únicamente 80 mil dólares americanos”, y cita que el 3 de abril de 2019 se vio obligado a firmar un acta de conciliación donde reconocía que adeuda los US$ 180 mil.
“La necesidad que teníamos los recurrentes (Calmet y su esposa) de recibir dinero en calidad de préstamo para recuperar una propiedad en el barrio Huáscar”, se lee en el escrito del polémico personaje.
¿Y LA CONCILIACIÓN?
Dicha conciliación fue firmada en el “Centro Nacional de Conciliación Ordóñez por un Consenso Imparcial y Justo”, en Puno. Ambos reconocen los 180 mil dólares, por concepto de diversos préstamos en dólares.
CITAN AL POLITÉCNICO
La propia Juana Rina Salas, en su contestación de demanda, sostiene que Enrique Calmet, desde el año 1999, en adelante, le pidió préstamos de dinero para sanear y tomar control del terreno del politécnico Huáscar.
“La suscrita conoció a los demandados por el año de 1995, posteriormente en el año 1999 los demandados se apersonaron a mi casa solicitando que les preste dinero en el cantidad de 15 mil dólares americanos (…) para lo cual no firmaron documento alguno pues solo bastaba la palabra de los demandados para la suscrita, indicando que me ofrecieron un porcentaje de dichos terrenos (terrenos del Politécnico Huáscar)”, se lee textualmente en la contestación.
PROCESO DE EMBARGO
En la conciliación, ambos dejaron en garantía un departamento en la calle 11, Manzana “A”, Lote 39, departamento 401, distrito de Yanahuara en Arequipa.
Como Calmet y esposa no pagaban la deuda, doña Juana Rina Salas, decidió entablar un proceso por obligación de dar suma de dinero, es decir fue por el embargo.
SENTENCIA EN CONTRA
La demanda que se inició en mayo de 2022 no surtió efecto, pues Calmet Choque olvidó que la conciliación tiene carácter de sentencia y que además, él y su esposa no solo estaban en sus cabales, sino que también es abogado y conoce qué es lo que firma.
REVÉS JUDICIAL
Así, en 2 de noviembre de 2022, el juez Huanca Yampara, emitió en primera instancia la sentencia N° 163-2022-CI que resuelve “infundada la pretensión de nulidad de acto jurídico parcial por simulación…”, “Improcedente la pretensión de ineficacia de acto jurídico de reconocimiento de deuda contenida en el acta de conciliación con acuerdo total N° 003-2019…”, y “Con expresa condena de pago de cosas y costas del proceso a los accionantes Enrique Calmet Choque e Ivette Paola Rodríguez…”.
«SUS MOVIDAS…»
Sin Fronteras se contactó con la referida financista, quien sostuvo que Calmet no le quiere pagar y que su justificación sería que no tiene dinero. Admitió que él solía indicarle que los préstamos eran para recuperar los terrenos del Politécnico Huáscar.
“Está apelando, está haciendo sus movidas como siempre… Él me ofrecía los terrenos de Huáscar, pero yo nunca le acepté”, expresó y precisó que estos temas no figuran en los documentos de préstamo ni en la conciliación.
CALMET AFUERA…
Intentamos contactar a Enrique Calmet en los últimos días, pero uno de sus colaborares nos indicó que estaba fuera del país. Un pariente confirmó ese dato, y dijo que se fue a los Estados Unidos, de vacaciones.
Comentarios de Facebook