Las movilizaciones en rechazo al Ejecutivo, que se convocaron en las diferentes provincias de la región Puno y el Perú, se dieron de manera reducida.
En el pueblo fronterizo de Desaguadero varios negocios amanecieron cerrados por precaución, sin embargo, el puente internacional se mantuvo despejado hasta el mediodía en donde manifestantes bloquearon la vía con una infraestructura metálica.
En Yunguyo, las actividades se desarrollaron con normalidad a excepción de la movilización de docentes del Sutep en horas de la tarde. En Kasani también se observaron restricciones en los servicios turísticos.
En Juli e Ilave se tenía el compromiso de que una caravana se desplace a Puno, sin embargo, no fue así. En horas de la tarde se levantaron varios piquetes en la vía Puno – Juli.
En cambio, en las provincias como Carabaya, Melgar, Azángaro, Moho, entre otras, la población salió a movilizarse de manera pacífica en horas de la tarde, lo mismo se replicó en los distritos.
En el distrito de Asillo se llevó a cabo una asamblea entre todas las organizaciones, en donde acordaron acatar un paro de 72 horas los días 27, 28 y 29 de julio.
Cabe resaltar que en varias provincias las actividades académicas fueron suspendidas por sus respectivas Unidades de Gestión Educativas (UGEL).
Sobre la marcha a la ciudad de Lima, dirigentes de las provincias de Azángaro e Ilave, recordaron que el 21 de julio se estarían desplazando las últimas caravanas de manifestantes para sumarse a las protestas en contra del gobierno de Dina Boluarte, que se lleva en la capital de la República. Las protestas se intensificarían desde el 21 julio.
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