Investigaciones de la PNP serán clave para el caso.Investigaciones de la PNP serán clave para el caso.

Juliaca. ¡Inocencia quebrada! Merardo C.A. (35), como papá, debió protegerla y velar que crezca en un ambiente sano y feliz. Sin embargo, se convirtió en el verdugo de su propia hija de 14 años, tras supuestamente ultrajarla sexualmente.

El indignante y reprochable caso sucedió en el distrito de Paratía, de la provincia de Lampa, tras la denuncia de la víctima de iniciales J.C.C., de 14 años, quien entre lágrimas reveló que su padre biológico la sometía a sus deseos carnales hace más de un año.

MALESTARES

El hecho fue revelado el 6 de abril, cuando los médicos del Centro de Salud de Paratía atendieron a la adolescente porque presentaba malestares como dolor de cabeza, mareos, y otros síntomas extraños.

Resulta que la niña, en compañía de un familiar asistió a la Posta Médica, pues pensaron que los malestares que tenía eran debido al agua contaminada que bebió, producto del desborde de una poza de relave minero de la empresa “Ciemsa” que se registró producto de las intensas lluvias.

A raíz de ello, los profesionales de salud la atendieron y medicaron para quitar los dolores y luego le dieron de alta.

CONTÓ SU VERDAD

Horas después del mismo día, la víctima de iniciales J.C.C., regresa al Centro de Salud porque los vómitos y otros síntomas no calmaban, pese a las medicinas.

Esto les pareció extraño, por ello, la adolescente y por los síntomas que tenía fue derivada al área de obstetricia. Ahí la adolescente fue examinada. Es así que la niña rompe en llanto descontrolado indicando de que fue víctima de violación presuntamente por su propio papá biológico.

TEST DE EMBARAZO

A la víctima le hicieron un test de embarazo en la posta y el primer resultado fue positivo. A raíz de ello, los médicos inmediatamente avisaron a los efectivos de Policía Nacional, quienes actuaron estratégicamente y con rapidez para capturar al presunto autor.

No obstante, la menor volvió a ser reevaluada en Medicina Legal para corroborar la gestación, y conocer la edad del feto, pero según el resultado fue: “no gestante”; quiere decir que no hay embarazo. Los análisis arrojaron que tenía un quiste en los ovarios.

Pero sí presentaba defloración antigua. Es decir, la acusación sobre la violación de su padre tenía asidero.

DESDE EL 2022

La adolescente indicó que su padre supuestamente comenzó a ultrajarla desde febrero del 2022, y la última vez que fue violada fue los primeros días de abril, cuando su mamá salió de viaje.
Con respecto a la madre de la agraviada, Y.C.V. (34), al enterarse por su hija sobre la aberración rompió en llanto, y no creía que su marido fuera capaz de tal atrocidad.

Sin embargo, pese al dolor que sentía, decidió apoyar y creer en su hija, y denunciar al imputado que está en manos de la Policía.

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