El alcalde provincial de Jorge Basadre Grohmann, Julio Dávalos Flores, denunció la actitud negligente de las anteriores gestiones municipales, a las que responsabilizó de no solucionar el desabastecimiento de agua potable en perjuicio de las familias de Locumba y anexos.
Señaló que Tacna ha entrado en una etapa a la que llamó «años secos» debido a que no hay recarga de la napa subterránea porque en la zona andina no hay deshielos.
Frente a la disminución de horas de abastecimiento de agua potable y la baja presión que llega a los domicilios de las 150 familias que viven en Locumba, el burgomaestre señaló que ha convocado para hoy una reunión de coordinación en su despacho con funcionarios de la Entidad Prestadora de Servicios de Saneamiento (EPS) Tacna.
“Ellos están a cargo de la distribución y abastecimiento de agua, y además plantearemos la reapertura de su oficina de servicios al público para que la gente no tenga que ir a Tacna”, señaló.
El problema radicaría en el sector de Cinto, donde habría 36 pozos clandestinos distribuidos en chacras que no tienen ninguna autorización para extraer agua, situación que está generando poco almacenamiento del recurso, indicó la autoridad edil.
“En Cinto, Oconchay y otras zonas no cuentan con agua, es decir, el problema es en todo el valle”, precisó.
Locumba recibe menos de cuatro horas de agua con poca presión al día.
«La asociación de vivienda Alto Locumba tiene serios problemas para abastecerse del recurso”, comentó el alcalde basadrino.
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