Un irresponsable chofer cegó la vida de una madre y su hija al atropellarlas con su auto cuando ambas salían de la misa nocturna de la parroquia Virgen de la Candelaria e iban de regreso a su vivienda la noche del domingo.
El accidente ocurrió a las 19:30 horas en la avenida Cristo Rey, al costado del colegio del mismo nombre, cuando la ciudadana Ercila Amaya de Enriquez (65) empujaba por la zona peatonal la silla de ruedas de su hija Rubby Enriquez Amaya (43), quien presentaba un leve retraso mental.
Un auto negro que venía circulando en ziz zag, según varios testigos, se despistó y arrolló a las dos mujeres, que cayeron al asfalto 25 metros más adelante, para después darse a la fuga sin vacilar. Miembros de Seguridad Ciudadana y personal del SAMU hallaron a la sexagenaria sin vida y a su hija en estado muy grave, trasládandola al hospital Hipólito Unanue.
El cuerpo de Ercila Amaya de Enriquez (65) fue internado en la morgue central y lamentablemente su hija Rubby Enriquez falleció la mañana del lunes en el área de Cuidados Especiales del nosocomio luego de ser diagnosticada con una hemorragia cerebral y fractura en la base del cráneo.
Agentes de la comisaría Central y del área de Tránsito con el fiscal Cristian Carrillo ahora buscan al chofer fugitivo.
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