Un grupo especial de investigadores de Homicidios y Desaparecidos del Depincri de la Policía Nacional del Perú (PNP) fue conformado para la búsqueda exclusiva de la ciudadana Priscila Bravo Álvarez (26), quien no retornó a su vivienda el 29 de abril tras acudir a un galpón con su pareja.
El jefe de la División de Investigación Criminal, coronel PNP Manuel Guerrero Cerpa, señaló este martes que los agentes inspeccionaron la vivienda de la pareja en la urbanización Bacigalupo para buscar indicios de violencia y ahora revisarán su vehículo buscando otros indicios, como huellas de sangre.
El Depincri además trata de rastrear los celulares de Bravo por el sistema de geolocalización, pero los equipos se encuentran apagados. Ahora se requerirá el levantamiento de las comunicaciones para saber el lugar donde usó sus celulares por última vez y con quiénes se comunicó.
Guerrero aclaró que las diligencias avanzan en torno a una desaparición, pero se podría investigar un delito de desaparición forzada según los indicios que se encuentren. La familia de Priscila Bravo realizó una protesta la tarde del martes en la plaza Zela, señalando a su pareja, Benjamín Batallanos, de ser el sospechoso ya que fue el último que la habría visto la noche del 29 de abril, cuando ambos salieron a un galpón del distrito Calana.
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