Jacinto Ticona Huamán, jefe de la Defensoría del Pueblo en Puno, habló sobre los casos de violencia a menores de edad, ya que probablemente, muchos casos no se estarían denunciando por varios motivos, uno de ellos, serían porque los padres o familiares no quieren que se manche el honor de la menor y en otras ocasiones los agresores son los propios miembros de la familia y ello no se quiere ventilar para evitar miramientos; ante ello, muchos optan por el ‘arreglo’, algo que es rechazado por el defensor del Pueblo, quien indicó que ningún acto de violencia debe ser materia de arreglo.
No se conoce las cifras de violencias que no se denuncian, pero se sospecha que es una buena cantidad quieres tratan de arreglar tras actos de violencia a los menores.
Ante ello, invocó a los padres de familia a perder el miedo para denunciar, sin importar de que se trate de una familiar o allegados, porque solo así se puede hacer respetar la dignidad y el derecho a la libertad que tiene el ser humano.
Mucho se dijo de la castración química para los agresores a menores, frente a ello, Ticona Huamán, señaló que, es una metodología al que han acudido otros países y se tendría que averiguar sobre los resultados mayor gasto. Ante ello, dijo que se debe trabajar más en la salud mental.
Cabe indicar que, en la región Puno, existe 10 centros de salud comunitarios, los mismos que fueron implementados a exigencia de la Defensoría del Pueblo e indicó que más de estos se debe implementar para que la población acuda de manera oportuna y reciba una asistencia u orientación. Ya que considera que, con ello, se puede bajar las tensiones, porque, lo que falta en las personas es el autocontrol frente a una angustia o desesperación.
Todo ello, indicó, tras la violación a una menor de tan solo 3 años por un ‘monstruo’ en Chiclayo.
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