Representantes del Gremio Nacional de Transportistas y Conductores (GNTC) alzan su voz de protesta. Cansados de los elevados costos del combustible, la poca actividad comercial en su sector y la corrupción, convocaron a una huelga nacional indefinida desde el lunes 28 de marzo.
Recomendaron a la población abastecerse de insumos, puesto que no darán marcha a su paralización hasta que no haya decretos firmados.
El vicepresidente de la GNTC, Magno Salas, informó que, cansados de mesas diálogo y promesas incumplidas por parte de funcionarios del gobierno, los transportistas han acordado no levantar la manifestación hasta que hayan resoluciones firmadas por dos de los poderes del Estado: Ejecutivo y Legislativo. Por tanto, proyectan que la huelga se puede extender por más de 15 días, lo cual afectaría la canasta familiar.
Con esta paralización, Salas explicó que piden acciones concretas del presidente Pedro Castillo respecto al alza de los combustibles. Según la última actualización de ayer, los gasoholes incrementaron entre un S/ 1.70 y S/ 1.90, de acuerdo a los octanos.
«Si bien no es competencia del jefe de Estado establecer el precio del combustible porque este se rige por la oferta y la demanda y depende en gran medida del mercado internacional, si es su responsabilidad adoptar medidas como lo vienen haciendo países hermanos, que han disminuido los impuestos a los transportistas o han implementado subsidios», refirió.
También exigen eliminar el impuesto al patrimonio de los vehículos de carga, ya que este equivale a unos 18 mil soles por camión. El Estado, dicen, solo sabe gravarlos y no les da ningún beneficio; mientras tanto, continúa la competencia desleal de los transportistas de carga pesada que provienen de Bolivia, pues llegan con combustible comprado en su país a precios mucho más bajos.
Gremios de taxistas de Arequipa evalúan sumarse a esta paralización, debido a que sus ganancias se han reducido hasta en S/ 10 cada día y esto afecta su economía familiar.
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