Los padres de Milagros M.Q. (19), acompañados de varias personas con carteles en mano, exigían justicia en los exteriores del hospedaje de la primera cuadra del jirón Alfonso Ugarte, lugar donde fue hallada muerta la estudiante de Psicología, y cuyo principal sospechoso es Royer Muchica Pilco (18), un joven quien habría indicado a la Policía que solo ayudó a la muchacha porque la vio mal.
LA RECONSTRUCCIÓN
La habitación 204, fue inspeccionada nuevamente por la Policía. El investigado participó de las diligencias.
Fuentes cercanas, anotaron que los investigadores se centraron en investigar el cable URC con el que la muchacha supuestamente se habría suicidado en el baño.
Los detectives también investigarían las posiciones en las que fue encontrada la víctima; ya que el detenido habría contado que cuando la vio suspendida de un cable en el baño, este la bajó y la recostó en la cama.
INCONGRUENCIAS
Fuentes cercanas indicaron que existirían incongruencias, las cuales se determinarían en el transcurso de los días, donde se podría afirmar técnicamente si el hecho fue un suicidio o un feminicidio.
Uno de los aspectos a investigar al detalle, sería la lesión que presenta la occisa a la altura del cuello.
GUARDÓ SILENCIO
Los hombres de prensa intentaron conocer la versión de Royer Muchica, pero él decidio guardar silencio.
La diligencia concluyó y Royer Muchica tenía que salir. Afuera lo escoltarían varios agentes de la USE para que este aborde la móvil policial.
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