Un mal padre obligaba a pedir limosna y a vender bolsitas con habitas a sus pequeños hijos en el frontis de los malls de la ciudad y la calle San Camilo (Cercado). La Policía realizó un operativo y rescató a seis menores de entre 5 a 12 años que se encontraban viviendo en pésimas condiciones.
La intervencion, a cargo de los efectivos del área de Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes, conjuntamente con representantes del Ministerio Público, permitió detener a Ambrocio Holgado Apaza (56), quien permanecerá detenido por orden del Juzgado de Investigación Preparatoria de Mariano Melgar por 72 horas, mientras se continúa con las diligencias. El sujeto es investigado por el delito de explotación laboral. Se supo que el varón, tras su detención, guardó silencio.
SEGUIMIENTO
Las investigaciones inician en el mes de setiembre, luego de que una mujer denunciara los maltratos al que eran sometidos los niños. Luego una de las menores contó que no había desayunado ni almorzado, pero tenía que seguir trabajando para que las personas les puedan dar una moneda.
Los agentes del orden, con la información obtenida, realizaron seguimiento y descubrieron que los niños eran obligados a trabajar desde las 8 de la mañana hasta las 8 de la noche. Además, Ambrocio Apaza, dos veces por día, recogía el dinero que recaudaban sus hijos. «El trabajo de seguimiento que hicimos por dos meses nos permitió observar que los niños eran explotados y muchas veces no recibían alimentos», indicó el teniente PNP Renato Delgado Añamuto.
ALLANAMIENTO
Con la orden judicial, los policías, al promediar las 6 de la mañana, procedieron con el allanamiento con descerraje y registro domiciliario del inmueble ubicado en la Asociación de Vivienda Villa Los Olivos del distrito de Chiguata, donde se halló a 4 niñas y dos varoncitos de iniciales Y.H.M. (10), Y.H.M. (5), L.H.M. (12), Y.H.M. (7) y a los mellizos J.A.H.M. (9) y J.F.H.M. (9). Aparentemente, los niños estarían con desnutrición. Ellos fueron llevados a la Unidades de Protección Especial (UPE).
Los agentes en la vivienda incautaron 11 celulares y varios vouchers de depósitos a nombre de una tercera persona, que los efectivos mantendrían en reserva.
La mañana de ayer la madre de los menores llegó desde Cusco y manifestó no saber lo que sus hijos estaban padeciendo.
Para la Policía habría más personas involucradas.
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