Puno. A inicios de año, la docente Erika Olivera Condori, postuló a una de las plazas que ofertó el Instituto Pegagógico de Puno, pero fue maliciosamente desaprobada. Ella denunció que fue contactada por el director
Luis Paucar Flores y Hernán Apaza Pinto, dos de los tres miembros de la comisión de concurso, quienes le solicitaron dinero a cambio de admitir su reclamo presentado el último 19 de marzo.
Ante la Fiscalía Anticorrupción contó que al día siguiente le llamó Apaza Pinto para decirle que se reuniría con el director. La cita se pactó en el óvalo Dante Nava, donde Paucar Flores le habría pedido 2 mil soles.
Esto lo grabó y alcanzó al fiscal William Otazú, quien denunció el hecho ante el Juzgado Anticorrupción de Puno que despacha María Morales.
SUSPENSIÓN
En tiempo récord, la magistrada suspendió por dos años al director del Pedagógico Puno, Paucar Flores y al jefe de Unidad Académica, Apaza Pinto, por ser coautores del presunto delito de cohecho pasivo impropio.
El director ha reconocido que se reunió con la postulante pero negó que haya pedido dinero y cuestionó los audios presentados que habrían sido editados y recortados.
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