Juliaca. En esta pandemia se ha intervenido a locales que han venido funcionando pese a la prohibición que existe, lo increíble es que siguen funcionando a vista y paciencia de las autoridades.
Tal es el caso del establecimiento campestre “Koritika” de la salida a Huancané, que este fin de semana congregó a miles de ciudadanos, dejando en claro lo frágil que son las sanciones contra algunos de estos locales que se burlan de las medidas sanitarias.
“MACHUPICCHU”
Días atrás la Municipalidad de San Román anunció la revocatoria de la licencia del local “Machupicchu”, en el jirón Ayacucho, lo que fue aplaudido en su momento, pero sigue atendiendo; es más, a unos metros de “Machupicchu” atiende una discoteca denominada “Toretto”, frecuentada por jóvenes que salen ebrios a altas horas de la noche y la municipalidad no interviene.
«ROMA”
En el mes de febrero nuevamente la discoteca “Roma”, situada entre la avenida Maestro y Piérola, propiedad de una conocida artista folclórica, cayó por tercera vez en esta pandemia, pero al parecer lleva “una corona” bien puesta desde la MPSR, pues realiza fiestas y las anuncia a través de las redes sociales, y ni así las autoridades policiales y de la municipalidad pueden hacer algo para impedirlo, este local sigue gozando de su licencia como si nada pasara. Lo mismo sucede con las discotecas del pasaje Palestina, Plaza Bolognesi que funcionan a vista y paciencia de la población.
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