El proyecto millonario de agua potable en los barrios de la zona norte de Puno, aún no se inicia pese a que la Municipalidad Provincial de Puno colocó la primera primera piedra en el mes de octubre de 2020.
El contrato fue firmado el 7 de octubre al Consorcio Reimanns Contratistas y Consultores SAC, por 22 millones 500 mil de soles, y la comuna ha dado más de 6 millones de adelanto, pero solo se colocó un cerco de calaminas.
El dirigente de Alto Puno, Eloy Gonzáles, dijo que la comuna le indicó que los trabajos comenzarían recién en abril, cuando pase la pandemia.
El vecino Manuel Apaza, amenazó con no permitir el paso de vehículos en su terreno, cuando inicien las obras. «Por dónde irán, por acá no pasarán», dijo.
Antes de la buena pro, la regidora Wilma Arizapana, denunció anomalías en el proceso. Al respecto, el OCI de la MPP, con informe 045-2020 del 9 de diciembre, concluye que una «situación adversa que afecta o podría afectar la continuidad del proceso», y recomienda al alcalde que «adopte acciones preventivas y correctivas que corresponda».
Jaime Apomayta Choque, jefe de Logística, sostiene que la obra no inicia por problemas en los terrenos y que escapan de su responsabilidad.
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