Bustamante y Rivero. La pandemia de la covid-19 ha desatado otras crisis en nuestra sociedad, algunas más silenciosas que otras, pero no por ello menos importantes como la crisis agraria y de alimentación. La cual, hasta el momento, ha afectado a más de 50 mil agricultores, sobretodo a los que siembran papa, palta, vegetales y maíz, que tuvieron que rematar e incluso regalar sus productos a causa del rompimiento de la cadena de distribución durante los meses de aislamiento social.
Sin embargo, la situación no ha mejorado, puesto que la campaña agrícola 2020-2021 aún es incierta debido a que hasta la fecha, los agricultores no han podido acceder a créditos que les permitan iniciar la nueva siembra.
Empero, las proyecciones no son mejores, puesto que pese que hace unos días, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) aprobó el reglamento operativo del Programa de Garantía del Gobierno Nacional para el Financiamiento Agrario Empresarial (FAE-Agro), que tiene por fin garantizar los créditos de capital de trabajo de auqellos que realicen agricultura familiar, estos no llegarían al sector agrario porque el programa no se adapta a la realidad y a las necesidades del pequeño y mediano agricultor de la región.
Para Jesús Díaz Salas, presidente de la Sociedad Agrícola de Arequipa (SADA), el programa está destinado al fracaso porque los requisitos son poco accesibles para los agricultores como es el caso de las cajas de créditos que a diferencia del Banco Agropecuario (Agrobanco), tienen requisitos más flexibles, puesto que si uno quiere que este último lo financie es indispensable ser asociado a una junta de usuarios o comisión de regantes para que avalen y no como persona natural.
Asimismo, otra de las desventajas son los bajos montos otorgados por el programa FAE AGRO debido a que en promedio la inversión para una hectárea sobrepasa los 20 mil soles, por ejemplo el costo de producción de una hectárea de papa es de 22 mil soles, de cebolla oscila entre 20 mil y 22 mil soles mientras que la siembra de ajo está por encima de los 25 mil soles.
Sin embargo, el programa establece que los agricultores con cultivos de menos de cinco hectáreas podrán recibir créditos de hasta S/ 30 mil.
Empero, un solo crédito sería insuficiente para afrontar toda la siembra, puesto que por lo general, la mayoría de agricultores tienen dos o más terrenos. De modo que si se ciñen a estas condiciones la capacidad de siembra se vería reducida a la mínima expresión. A esto se suma, que los agricultores que deseen acceder a este monto están obligados a prendar su fundo como garantía con el riesgo de perderlo si la campaña fracasa, señaló Díaz.
No obstante, esta situación no solo afectaría a los agricultores sino que se trasladaría a la población, puesto que la reducción de siembra, luego, se reflejaría en los mercados, ya que sin oferta de productos de primera necesidad estos encarecen.
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