La Rinconada Algo insólito sucede en el calabozo de la Comisaría de la Rinconada (San Antonio de Putina). Una juez ordenó que allí sea custodiado Bismar Juan Guevara Llano, un peligroso sujeto, procesado por asalto a mano armada, luego que arrojara positivo a la prueba rápida de la Covid-19.
La titular del Juzgado de Investigación Preparatoria de Ananea, Teresa Bustinza Fernández, ordenó que este cumpla su cuarentena en la carceleta del puesto policial.
La situación hubiera pasado desapercibida, solo que la comisaría tiene un solo servicio higiénico, que es usado por el singular prisionero y los efectivos policiales. El fin de semana, dos agentes se quejaron por síntomas del Coronavirus, pero indican que no les hicieron caso.
Los uniformados tienen contacto con el detenido, no solo usan el mismo baño, sino que dicen sentir los tosidos del encarcelado. “Además, como es debido, lo custodiamos para que no se haga daño, suele gritar y lamentar que no quiere morir allí”, dijo un policía quien detalló que lo custodian desde los primeros días de agosto.
Guevara Llano fue detenido el 31 de julio, luego que Fredy Deza Clavijo y Melquiades Mamani Endara, lo reconocieran por haberlos asaltado y encañonado un día antes. Su secuaz Arnold Alvis Canchi, purga prisión preventiva en el penal de La Capilla, en Juliaca.
Los policías indican que el apresado es visitado por sus parientes y amigos que le llevan comida, y que mantener contacto o estar expuesto es imposible, por ello piden que sea trasladado a otro lugar aislado donde el personal esté protegido.
COMISARIO CONFORME
El comisario, mayor Renzo Béjar López, desestimó las quejas y dijo que solo el prisionero usa el único baño. “Solo él lo usa, el resto no… no sé a qué viene su pregunta. No te puedo dar más información a menos que vengas en persona”, y nos cortó. 
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