La serenata por el 357° aniversario de Puno, realizada la noche del 3 de noviembre, se vio empañada por denuncias de desorganización, maltratos y presunta venta irregular de cintillos de ingreso.
DENUNCIAS
Diversos videos y testimonios, algunos en redes sociales, evidenciaron desorden en los accesos al evento, donde se ofrecían cintillos para zonas Súper VIP entre 30 y 50 soles, pese a que se trataba de una actividad pública.
Minutos antes de la medianoche, el público, cansado de las largas colas, irrumpió rompiendo el cerco de seguridad, lo que generó una estampida controlada por la Policía. Asimismo, se registraron enfrentamientos entre asistentes y personal de seguridad privada por la restricción al ingreso de bebidas externas, lo que muchos calificaron de abuso.
REGIDORA MALTRATADA
La regidora María Vianney Rodríguez Espezúa denunció maltratos y cuestionó el manejo del evento: “Hubo desorden y falta de respeto al público. Esto debe explicarse ante el Concejo Municipal”, declaró. Por su parte, el regidor Henry Flores Villasante exigió investigar la distribución y posible venta de cintillos.
NIEGA LA VENTA
Mientras que el presidente de la Comisión de Festejos, Tomás Mamani Calixto, negó la comercialización de entradas y aseguró que los cintillos estaban numerados y fueron entregados oficialmente a los regidores y a personal del municipio.

