La misa de ocho días en memoria de Mercedes Romero Aguirre de Coronado, realizada el último miércoles en la Parroquia Santiago Apóstol de Pomata, generó gran expectativa entre la población, ya que por primera vez fue presidida por el capellán de la Cuarta Brigada de Montaña de Puno, Andrés Flores Arriarán.
El hecho se produjo en medio de la tensión existente por el rechazo al obispo de Juli, Ciro Quispe, y el repentino cambio del párroco de Pomata. Ante esta situación, un grupo de feligreses gestionó desde Lima la presencia del capellán militar para oficiar la misa en honor a la reconocida vecina.
La participación de Flores Arriarán, sumada a las críticas que ha recibido el nuevo párroco, incrementó el pedido de la comunidad para que el capellán sea designado como responsable de presidir las principales celebraciones litúrgicas, especialmente la fiesta de la Virgen del Rosario, una de las más importantes de la localidad.

