Nuevos hallazgos reavivan el caso del feminicidio de Sheyla Cóndor, ocurrido en noviembre de 2024. Un informe pericial detectó rastros de sangre de una tercera persona en el departamento de Darwin Condori, agente de la Policía Nacional y principal implicado.
La defensa de la familia sostiene que esta prueba sugiere la intervención de un cómplice. El abogado Aaron Alemán exige acelerar la investigación y ampliar las diligencias fiscales.
El informe detectó manchas de sangre en la puerta y paredes del inmueble. Las pruebas biológicas arrojaron resultados positivos, según la perito bióloga a cargo.
La familia de la víctima también ha solicitado que se incluya a la Policía Nacional como tercero civil responsable. Alegan que Condori tenía denuncias previas por violencia que no fueron atendidas.
Darwin Condori fue hallado sin vida días después del crimen, lo que complicó la línea investigativa. En su momento, varios presentes en el lugar fueron detenidos y liberados. El caso estuvo paralizado por meses.
La nueva evidencia podría cambiar el rumbo de las pesquisas. La defensa pide que no quede impune