El burgomaestre de Azángaro, Salvador Apaza Flores, no quiso arrodillarse ante la sagrada imagen del Arcángel San Miguel, patrono del distrito de Achaya. Esto sucedió durante la misa de aniversario, donde las autoridades y pobladores se inclinaron ante la sagrada imagen.
Se pudo apreciar que el alcalde azangarino se mantiene en pie, olvidando quizás los tiempos en que vestía túnicas religiosas.
La autoridad edil es conocida como el «Padre Salvador Apaza», ya que durante una temporada sirvió a la comunidad católica como párroco de Capachica y Azángaro, posteriormente fue separado por su congregación al no saber conservar su voto de castidad y obediencia.
¿HEREJE?
Entre los devotos, hay quienes lo consideraban como hereje e hipócrita.
Achaya celebró hoy el CLXXI Aniversario de creación política.