Europa dio un paso clave en su estrategia de apoyo a Ucrania. En una reunión en Londres, los líderes europeos presentaron un plan de cuatro puntos para reforzar la defensa ucraniana y disminuir su dependencia de Estados Unidos.
El encuentro, liderado por el primer ministro británico, Keir Starmer, contó con la participación del presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, y otros mandatarios europeos, además de Canadá y Turquía.
– Mantener el flujo de ayuda militar a Ucrania y aumentar la presión económica sobre Rusia.
– Garantizar la soberanía y seguridad de Ucrania en cualquier negociación de paz.
– Disuadir futuras agresiones rusas con un acuerdo de seguridad a largo plazo.
– Crear una coalición internacional para la defensa y estabilidad de Ucrania.
Starmer enfatizó que Europa debe asumir un rol más activo, aunque admitió que el respaldo de EE.UU. sigue siendo crucial. Además, anunció un paquete de 1.600 millones de libras para que Ucrania adquiera más de 5.000 misiles de defensa.
La reunión se produjo en un momento crítico. Zelensky regresó recientemente de Washington tras un tenso encuentro con Donald Trump, quien condiciona su apoyo a Ucrania a un acuerdo con Rusia.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, subrayó la necesidad de fortalecer la defensa europea y prepararse para cualquier escenario. Mientras tanto, el primer ministro polaco, Donald Tusk, afirmó que «Europa ha despertado» y ahora habla con una sola voz sobre la guerra en Ucrania.
El plan europeo busca estabilidad en la región, pero la incertidumbre sobre el papel de EE.UU. sigue siendo una incógnita.