Luego de un largo silencio, la Conferencia Episcopal Peruana se refirió a la situación del cardenal Juan Luis Cipriani, acusado de abuso sexual. A través de un pronunciamiento, la presidencia de la institución manifestó su pesar y solidaridad, sin expresar su condena a los hechos presuntamente perpetrados por el exarzobispo de Lima y primer cardenal del Opus Dei.
Asimismo, calificaron de “sabia decisión” del Papa Francisco al aceptar la renuncia del Cardenal Cipriani como Arzobispo Emérito de Lima al cumplir los 75 años, tal como establece el derecho canónico. Además, saludaron las limitaciones ministeriales al cardenal como parte de las medidas disciplinarias. Según confirmó el Director de Prensa del Vaticano, estas acciones se tomaron tras comprobarse la veracidad de los hechos denunciados.
“Nos sentimos apenados al conocer las recientes noticias acerca del Cardenal Cipriani. Lamentamos el dolor sufrido por la víctima de abusos y por la comunidad eclesial y pedimos a todo el Pueblo de Dios que respete la voluntad de la víctima de permanecer en el anonimato. Reafirmamos nuestra cercanía a todas las víctimas de cualquier tipo de abuso”, expusieron y pidieron al “Pueblo de Dios” que ofrezca oraciones por la víctima, por el Cardenal Cipriani y por la Iglesia, con el objetivo de promover un ambiente de reconciliación.
Dicho pronunciamiento se da luego de que el Arzobispo de Lima, Carlos Castillo, hiciera un llamado a “convertirse” a quienes aún defienden al cardenal Cipriani por acusaciones de abuso y apoyara la decisión tomada por el Papa “apreciando su sabio modo de ejercer la justicia en la Iglesia y de acoger y proteger a las víctimas”.
Asimismo, agradeció el trabajo de periodistas que “han venido colaborado en la protección de las víctimas, y hago un llamado a todo el pueblo creyente de Lima y del Perú a reafirmar nuestra profunda fidelidad y adhesión al Papa Francisco, a sus decisiones y a su ministerio”.
“Todo ser humano tiene derecho a la defensa”
Horas antes, el alcalde de la Municipalidad Metropolitana de Lima, Rafael López Aliaga, se pronunció sobre el caso. Si bien mostró empatía por el relato de la víctima, cuestionó la falta de un juicio formal en el caso, subrayando que cualquier persona, sin importar su rol dentro de la sociedad o su afiliación religiosa, tiene derecho a defenderse de las acusaciones en su contra.
“No ha habido un proceso, un juicio, no hay derecho de defensa. Es como si a uno le clavaran una sentencia sin que le notifiquen, sin que se le dé la oportunidad de decir su verdad”, mencionó.
En ese sentido, subrayó que “todo ser humano, ya sea cardenal, sacerdote o laico, de cualquier religión, tiene derecho a la defensa”, e insistió en que el debido proceso es fundamental en cualquier acusación, independientemente del estatus de la persona involucrada.
“Lamento profundamente esta situación, tanto por cómo se debe estar sintiendo el cardenal Cipriani, como por la persona que también está hablando sobre este abuso”, finalizó López Aliaga.