La creciente ola de violencia contra empresas de transporte interprovincial en Huaycán ha llevado a los transportistas a anunciar un nuevo paro para la próxima semana. Martín Ojeda, director de la Cámara e Industria del Transporte, confirmó que esta medida busca exigir acciones concretas ante los constantes atentados y extorsiones que enfrentan.
“Hemos tenido reuniones con el ministro y el viceministro del Interior, pero no se ha coordinado nada efectivo”, señaló Ojeda.
En el último mes, seis ataques a buses se han registrado en un área de apenas dos cuadras, lo que ha generado preocupación entre los conductores y pasajeros. Según Ojeda, las extorsiones exigen pagos de hasta 40 mil soles para permitir que las empresas operen. Sin embargo, los transportistas que se niegan a pagar son atacados directamente, como ocurrió recientemente con un conductor que fue herido de bala.
Los transportistas han advertido que, si no se toman medidas inmediatas, las movilizaciones continuarán escalando.
“Señora presidenta, si usted no hace nada, el sector transportes poco a poco los va a ir parando, y se tendrá que ir”, expresó Ojeda en un llamado directo al Gobierno. Los ataques, además de derramar sangre inocente, han paralizado las actividades en la Carretera Central, una de las vías más importantes del país.
A pesar de los paros registrados en 2024, la criminalidad sigue siendo una amenaza constante. Los transportistas insisten en que la única solución viable es una intervención decidida de las autoridades, incluyendo un despliegue de seguridad permanente en las zonas más afectadas, como Huaycán. Por ahora, la incertidumbre y el temor dominan el sector, mientras las empresas evalúan las fechas exactas para ejecutar su próxima protesta.