Un alarmante incidente ocurrió en la madrugada, cuando un bus de la empresa Rodríguez, en ruta hacia el Callejón de Huaylas, sufrió el incendio de sus llantas traseras antes de llegar a Chasqui.
Los pasajeros, muchos de ellos dormidos, despertaron entre gritos de pánico solo para descubrir que el vehículo carecía de extintores para controlar las llamas. «¿Qué hubiera pasado si el fuego alcanzaba el tanque de combustible?», cuestionaron testigos del hecho.
Esta no es la primera denuncia contra la empresa. Usuarios relataron otro episodio el pasado 31 de diciembre, cuando el agua de lluvia se filtró en el segundo piso del bus, mojando a los pasajeros durante todo el viaje. «Viajamos en buses deteriorados, inseguros y abandonados», señaló una usuaria afectada.
Las críticas apuntan a la falta de mantenimiento, la ausencia de medidas de seguridad básicas y las condiciones precarias de los vehículos.
Los pasajeros exigen que las autoridades supervisen con mayor rigor a las empresas de transporte y garanticen condiciones dignas y seguras para los usuarios.