Islay. Decenas de comerciantes de la calle La Mar, en el distrito de Mollendo, están pidiendo a la Municipalidad Provincial de Islay que se aceleren los trabajos de cambio de tuberías de desagüe por el perjuicio económico que están sufriendo, ya que sus clientes no pueden acceder a los establecimientos.
Sin embargo, otro grupo de vendedores decidieron colocar sus mesas cerca de los escombros y vender sus productos, a pesar de los malos olores que emanan los buzones, para tener ganancias diarias. Otros propietarios de locales decidieron cerrar sus tiendas hasta que terminen las obras.
En tanto, otro grupo de vecinos apoyaron la ejecución del proyecto porque constantemente había el colapso del desagüe.