Hoy llega a Juli, el monseñor Marco Antonio Cortez Lara para investigar al obispo de esa prelatura, acusado de llevar una vida lujuriosa además de cometer abusos y supuesto festín de bienes de la iglesia.
La llegada del también obispo de Tacna y Moquegua, a la ciudad aymara, conocida como la «Roma de Altiplano», está programada para las 14:00 horas y será recibido por clérigos y la feligresía.
Cabe recordar que ante graves denuncias contra el obispo de Juli, Ciro Quispe López, la Nunciatura Apostólica en el Perú informó días atrás que la Santa Sede en Roma nombró a monseñor Marco Antonio Cortez Lara, como visitador apostólico para que de manera objetiva e imparcial llegue a Juli para recoger la verdad.
Fuentes de la Prelatura de Juli, dijeron a Sin Fronteras que las hermandades solicitaban al «visitador» y «comisario» enviado por el Papa Francisco, que mientras realice tal labor, el obispo de Juli sea separado interinamente de la Diócesis, a fin de garantizar un trabajo imparcial y objetivo.
«Nos hemos enterado que monseñor Marco Antonio solo se quedaría unos días, esperemos que sea suficiente para recabar la verdad», dijo una mujer que lleva en una de las dos hermandades, más de 40 años.