Argumentando un presunto incumplimiento de parte de la Superintendencia Nacional de Migraciones, sobre acuerdos pactados con anterioridad, el gremio de trabajadores del sistema CAS, de dicha entidad, anunció un paro indefinido, a nivel nacional, a partir de sábado 27 de julio.
La medida de fuerza responde a la falta de mejoras laborales de los protestantes, que exigen a las autoridades que implementen una mesa de trabajo para establecer acuerdo, caso contrario advierten con radicalizar la paralización.
Los trabajadores agremiados, 700 en total, reclaman mejoras salariales y mantenimiento de sus centros de labores.